dimarts, de desembre 26, 2006

Pincelada Herreña

Durante unos meses en el año 2000, conocí un grupo de personas encantadoras y con los que hacía una de las cosas que más disfruto. Eran los miembros de la Camerata Lacunensis. Qué placer pasar tardes y noches ensayando con ellos, fue una lástima tenerlos que dejar por mi aventura catalana y les sigo echando de menos!
Con ellos compartí algunos viajes, entre ellos, a El Hierro.


El viaje en avión fue de los peores que tuve nunca. A medio vuelo, el comandante augura un retorno a la isla chicharrera ante los estupefactos pasajeros que seguían aguantando las interminables turbulencias. Al cabo de unos minutos una azafata nos dice que quizá intenten aterrizar ... (!!!!) quizá?? Dios mío, aquello era surrealista. Al final conseguimos aterrizar en aquella pista más corta que el patio de mi antiguo instituto y superamos el mal trago. BINTER CANARIAS: NUNCA MÁIS!

Fuimos pocos días y por motivos artísticos. Vimos poco, pero lo suficiente como para prendarme de esta isla que espero visitar pronto y disfrutar del rincón más occidental de Las Canarias.


Recomendaciones: Las "quesadillas" son lo mejor de esta isla! Son unos pastelitos dulces hechos de queso de cabra: para morirse.






Vittro a El Hierro: Juny 2000